Un día habrá una isla 

(Las Islas en que vivo, 1971) Pedro García Cabrera

He reproducido las cantidades de la receta original, pero puede hacerse con la mitad de los ingredientes porque queda una torta enorme. En su origen como decíamos fue una receta de aprovechamiento, cuando sobraban papas o batata ya guisadas, pero con el tiempo se popularizó y pasaron a guisarse a propósito para hacer este dulce. Es un bizcocho húmedo que se mantendrá tierno muchos días, al menos una semana y que los días siguientes potencia su sabor. 

Preparación:

Guisar la batata o las papas añadiendo sal al agua de la cocción. Una vez guisadas y escurridas se trituran y se reservan. 

Preparar una "vilana" o bandeja de horno no muy profunda (la torta no debe tener mucha altura para que se cocine bien) poniéndole papel de horno en el fondo y en las paredes y engrasando el papel con mantequilla. Reservar. 

Precalentar el horno a 180/190 grados y seguir con la preparación. 

Batir la mantequilla con el azúcar hasta que desaparezcan los granos y sin parar de batir a velocidad media añadir los huevos uno a uno, la batata triturada, la almendra molida, la sal, la ralladura de limón y la canela. Finalmente añadir la harina con la levadura y mezclar hasta integrar. 

Volcamos la masa en la bandeja y adornamos con las almendras enteras y si queremos con unas pasas (el original sólo lleva almendras).

Llevar al horno y, en mi caso, con estas cantidades, estuvo 1 hora y 30 minutos horneándose. Si ves que se te está dorando mucho la superficie a mitad de la cocción puedes poner un aluminio para protegerla. Con la mitad de las cantidades calculo que tardaría en guisarse unos 40 o 50 minutos. Como siempre pinchamos con una brocheta para saber si está ya guisada. Si el palito sale seco ya estaría listo.

Por cierto, si no conoces las Islas Canarias debes saber que La Gomera es una Isla impresionante...  No debes perdértela.

¡Hasta la próxima!